Justo el día de antes de empezar el viaje, no encontramos nuestros documentos. Billetes para las aeronaves, pasaportes, discursos, plan de viaje, etc., todo ha desaparecido. El representante de la ONU que nos acompañará durante todo este proceso, es…., digamos una persona bastante peculiar (este sí que anda en la Luna y no nosotros), y lo único que recuerda es que los llevó al centro educativo y luego, cuando llegó a su casa, ya nos los tenía. Así que habrá que echarle una mano para encontrarlos.
Solo sabemos que los papeles los perdimos en el colegio CEIP Natalio Rivas, de Huéscar. Y la única herramienta que tenemos para ayudarnos a encontrar los documentos y así poder emprender nuestro super viaje de homenaje es un mapa detallado del centro escolar (para resolver esta prueba será necesario utilizar el Plano del Cole que puedes descargarte pinchando aquí). Bueno, y una serie de pistas que siguen el orden cronológico del camino que realizó el representante de la ONU el día que visitó el colegio que, si seguimos correctamente, nos llevarán al lugar donde se perdieron.
Así que esperamos que hayas estado muy atento sobre cómo se debe interpretar un mapa y que así, rápidamente, nos soluciones esta papeleta. Ahí van las pistas.
- Como no podría ser de otra manera, el primer lugar que visitó nuestro amigo fue el Vestíbulo del colegio, partimos de ese punto.
- En seguida y sobre todo muy rápidamente, pues llevaba ya tres horas de viaje en coche desde que aterrizó en el aeropuerto de Granada, nuestro amigo necesitó hacer un pis, le iba a reventar la vejiga. Decidió acceder al lugar habilitado para hacer esto que se encontraba situado más al “este”. Aunque dejó su mochila en la entrada de esa habitación, recuerda perfectamente que volvió a recogerla cuando salió.
- En seguida le llamó la atención el ruido de muchos niños correteando y jugando a la pelota, y recordando su niñez, decidió echarse un partido de futbol con los alumnos. Estuvo feliz y contento durante los 20 minutos que duró esta actividad. Luego, sonó el timbre y todos los alumnos se fueron a sus clases.
- Y el, como no podía ser de otra manera, empezó su trabajo, por lo que tuvo que juntarse con todos los profesores en el lugar habilitado para eso. Aquí tampoco recuerda haberlos dejado.
- Acabada la reunión, los profesores decidieron enseñarle el funcionamiento diario del colegio, por lo que le dieron una vuelta por el colegio. Lo primero que le enseñaron fue el lugar donde se encontraba la maquinaria que generaba el calor que calentaba el colegio. Una habitación imprescindible en un pueblo como este, en el que durante el invierno hace un frío de echarse a temblar.
- Seguidamente se dirigieron a la primera planta, a la que accedieron desde el vestíbulo principal, dirigiéndose hacia el ala “oeste” del colegio, donde se encontraba una habitación con 4 grandes ventanas que daban al patio del colegio. Allí, los alumnos estaban dando una clase de ciencias naturales y así, nuestro amigo, consiguió aprender un poco más sobre el bonito Parque Natural de la Sierra de Castril.
- Luego, se dirigieron a otro ala de la planta, el ala “este”, donde al final del pasillo había una habitación con dos ventanas que daban a la calle y que era utilizada como aula de informática. Aquí, nuestro amigo, que llevaba ya varios días visitando colegios de la provincia para organizar el viaje, aprovecho para mandar unos cuantos emails a su mujer y sus hijos. ¿Sería aquí donde perdió los papeles?
- No, porque en ese momento llegó la hora del almuerzo y nuestro amigo, junto con del equipo directivo del colegio, se fue del colegio a comer a un restaurante cercano. ¡Guauuuuuu! dijo chupándose los dedos cuando le pusieron un plato del típico cordero segureño que hay en esta zona, nunca había comido algo tan rico. Como le gustó tanto, hasta invitó él, por lo que está seguro que, cuando volvieron al colegio para acabar los detalles del viaje, la documentación estaba en su poder.
- Esta vez entraron al colegio por la puerta de la Secretaría, donde tuvieron otra pequeña reunión de trabajo. Estaba tan cansado que el pobre dio hasta alguna cabezada, pero le despertó una llamada de teléfono.
- Pidió disculpas al resto de compañeros y si dirigió al aula más cercana, donde pudo hablar tranquilamente sin ser escuchado ni molestado. Cuando volvió a la reunión, todos estaban listos para irse, así que, sin pensárselo más, se fue del colegio.
- Así que casi al 100% de posibilidades que la documentación se quedó en la habitación donde atendió a la llamada.
La contraseña para la siguiente prueba es el número de la habitación escrito con letras mayúsculas.